Hace unos años conocí a dos panaderos de mi pueblo en una charla de empresa.
Ambos llevan abiertos desde 1983.
Los dos habían pasado por la misma escuela.
Los dos vivieron la misma crisis que golpeó al país.
Y los dos tuvieron que dejar sus estudios para ponerse a trabajar y ayudar en casa, porque en aquel entonces lo más importante era llevar comida a la mesa.
Años después, con mucho esfuerzo, cada uno decidió montar su propia panadería.
Uno la abrió en la entrada del pueblo.
El otro, en la salida.
Durante mucho tiempo, la historia fue la misma para los dos.
Los dos tenían buenas ventas.
Los dos tenían clientes fieles.
Y los dos vivían de su oficio con tranquilidad.
Hasta que un día llegó Internet.
El panadero del norte, el de la entrada del pueblo, se preguntó:
“¿Qué pasaría si mi negocio sale en Internet? Puede ser una buena idea…”
El panadero del sur, en cambio, no hizo caso.
No era una persona que se informaba, no le gustaban las novedades… simplemente no se enteró.
Durante años, aunque el panadero del norte tenía la inquietud de poner su negocio en Internet, la realidad es que no sabía ni por dónde empezar.
Todo cambió en 2009.
Aquel año fue a Valencia para visitar a su proveedor de harina.
Allí lo abordó un hombre que ya estaba especializado en ayudar a negocios locales a salir en Google.
El panadero le contó su caso y aquel hombre le dijo algo que cambió el rumbo de su negocio por completo..
—“Si tu panadería aparece en Google Maps, Cualquiera que busque pan en tu pueblo, te encontrará a ti antes que a nadie.”
Ese mismo día, el panadero del norte contrató al señor y abrió su ficha en Google.
No era nada sofisticado, apenas un nombre, una dirección y un teléfono… pero fue el primer paso.
El panadero del sur, en cambio, siguió igual.
No hizo nada.
Seguía confiando en que Internet era una moda pasajera y siguió igual.
Con el tiempo, la diferencia empezó a notarse.
El panadero del norte cada vez recibía más visitas: viajeros que pasaban por el pueblo, vecinos de pueblos cercanos, gente que buscaba en su móvil “panadería” y lo encontraba a él.
Así, fue construyendo un flujo constante de clientes nuevos.
El panadero del sur, sin embargo, seguía dependiendo solo de su clientela de siempre: personas mayores que lo conocían de toda la vida.
Con los años, esa clientela se fue reduciendo… muchos fallecieron, otros ya no pasaban tanto por la panadería.
Y como no entraban clientes nuevos, cada subida de precios era un golpe más difícil de sostener.
Hoy, esa panadería sigue abierta, pero está mal….
Mientras tanto, la del norte no deja de crecer: tiene más clientes, más boca a boca…
Y lo más curioso es que los dos hacen un pan increíble.
La diferencia nunca estuvo en el producto, ni en los conocimientos, ni en la ubicación.
La diferencia estuvo en estar en Internet.
Pero..
Hoy la situación es distinta.
Ya no basta con abrir una ficha en Google.
Hoy casi todos los negocios tienen una.
El problema es que muchos siguen siendo invisibles aunque estén en Google.
Porque una ficha mal hecha, no sirve de nada.
Y es ahí donde entra el Método FAURA.
El Método FAURA es lo que hace que una panadería deje de ser “otra panadería más” para convertirse en la panadería.
No solo la que hace buen pan, sino la que abrió en 1983, sobrevivió a una crisis, ha pasado de generación en generación y sigue ofreciendo un producto increíble.
El secreto está en contar esa historia, darle valor y saber como transmitirla al cliente.
Porque muchos negocios pequeños tienen un servicio buenísimo y una historia apasionante… pero no saben cómo hacer que esa historia llegue al cliente.
Lo que hace FAURA es sacar a la luz ese valor oculto, darle forma con branding, copywriting y estrategia online, y conseguir que la gente no solo encuentre tu negocio, sino que lo recuerde y que se convierta en el favorito.
Haz que tu historia y tu valor se conviertan en la razón por la que te eligen y te olvidarás de tener que bajar precios para captar clientes.
¿Qué incluye el Método FAURA?
No.
Y esto es importante.
Solo trabajo con negocios serios, que quieran crecer de verdad y estén dispuestos a comprometerse con el proceso.
Si no te importa tu reputación, si no piensas pedir reseñas a clientes satisfechos o no estás dispuesto a aplicar mejoras, este servicio no es para ti.
Yo me implico al 100% como si tu negocio fuera mío, pero necesito que la otra parte también lo haga.
En los primeros 90 días verás más llamadas, visitas y mensajes desde Google.
El crecimiento es progresivo: mes a mes consolidamos visibilidad, reputación y diferenciación, hasta que Google y tus clientes te reconocen como la referencia local.
No trabajo con cualquiera.
Selecciono solo 1 negocio al mes tras evaluar potencial.
Si tu negocio no tiene margen de crecimiento, no te ofrezco entrar.
Por eso la tasa de éxito es tan alta.
Trabajo solo con quienes realmente pueden aprovecharlo.
Un SEO normal mete palabras clave, enlaces y ya.
Yo hago que tu negocio se convierta en una experiencia de inicio a fin.
Desde que te descubren por primera vez en google, la imagen que se llevan de ti, la percepción de valor que transmites, cómo el cliente VIVE la experiencia de ir a tu Local…. Todo.
Tú imagen, cómo te ven, cómo te encuentran, que dicen de ti, de que forma te recuerdan, todo.
Sí, porque la estrategia se adapta.
He trabajado con negocios donde cada nuevo cliente vale 200€ y con otros donde vale 3.000€.
En ambos casos, la inversión se recupera rápido porque el flujo de nuevos clientes es constante.
Casi todos los negocios tienen ficha… y aún así siguen siendo invisibles.
Una ficha mal hecha, sin estrategia y que no genere confianza no atrae clientes.
FAURA convierte tu ficha en un imán de ventas.
Visibilidad en Google (que te encuentren primero)
Hoy tu negocio puede estar en Google y seguir siendo invisible: tu ficha enterrada, sin llamadas y perdiendo clientes cada día que acaban en tu competencia.
Con el Método FAURA tendrás más llamadas, más visitas y más clientes nuevos entrando sin gastar en anuncios.
Reputación y confianza (que te elijan a ti)
Tener pocas reseñas, o comentarios negativos sin respuesta, transmite desconfianza y te obliga a competir solo por precio.
Con FAURA construyes un flujo constante de reseñas reales, respuestas profesionales que generan autoridad y una reputación que convierte a tu negocio en la elección obvia, más allá del precio.
Diferenciación con tu historia (que te recuerden)
Si tu ficha y tu web dicen lo mismo que todos —“calidad, profesionalidad, buen servicio”— serás uno más del montón.
Con FAURA convertimos tu historia en tu ventaja competitiva: un mensaje único, con branding coherente y un relato que hace que no seas “uno más”, sino la referencia de tu ciudad.
Seguimiento y mejora continua
Invertir en Internet sin entender resultados es frustrante: informes llenos de tecnicismos, sin saber si funciona ni cómo mejorar.
Con FAURA recibes informes claros con los números que importan —llamadas, WhatsApps, visitas, reseñas—, reuniones de seguimiento para ajustar la estrategia y acceso directo a mí para resolver cualquier duda rápido.
Cualquiera.
Si tu servicio es bueno, FAURA multiplica el alcance.
No.
No hay permanencia.
Me gano que te quedes con resultados, no con cláusulas.
Cada mes que tu competencia capta clientes en Google y tú no, estás perdiendo dinero.
El verdadero coste no es FAURA, es lo que dejas de ganar siendo invisible.
Por eso 900€/mes no es un gasto, es el trampolín que convierte tu negocio en la opción nº1 de tu ciudad. Si quieres ver si tu negocio es candidato, escríbeme por WhatsApp.
IMPORTANTE:
El Método FAURA no es infalible.
Porque ningún negocio crece sin compromiso, sin mejorar su servicio y sin cuidar a sus clientes.
Lo que sí es, es el sistema que pone a tu favor todo lo que hace que un negocio local funcione hoy:
Más visibilidad, mayor reputación, confianza y diferenciación.
Lo demás depende de ti.
Pincha en el botón de arriba para ver si me interesa
que trabajemos juntos.